lunes, 3 de enero de 2011

Lo que quieras



Creo que tengo un problema, estoy completamente obsesionado con un disco que, no le puse atención cuando lo encontré, pero ahora me tiene enganchado desde lo más profundo y juro por Dios que es más que un éxtasis escucharlo.

No voy a explicar el disco aquí, en dado caso lo haría en el otro blog. Lo que quiero decir el día de hoy es que encontré la canción perfecta en estos tiempos de mi vida, no hay más.
No encuentro palabras para explicarles todo lo que conlleva la canción y todo lo que significa, pero trataré de explicarme lo mejor posible.

Es un acto casi celestial de amor adolescente. Es el retrato perfecto de mí, en este momento de mi vida. Es todo lo que le he dicho a ella y todo lo que siempre he querido decirle, contextualizado en una sóla canción de 4 minutos y 31 segundos. Es impresionante todo el trasfondo de esta pieza. Realmente me impresiona mucho el disco, pero esta canción en especial es simplemente inmaculada, no tiene punto de comparación con ninguna otra, para mí, salvo algunos cortes del soundtrack de Once. Pero, liricas tan sustanciales en español, liricas tan honestas, tan directas, tan letales, tan violentas, tan precisas, tan jóvenes, tan dulces, tan yo, es casi imposible encontrarlas. Digo casi por que, lo hice con Dënver, y les estaré eternamente agradecido.

Hoy, en esta época de descanso vacacional, no tengo mejor compañero a falta de mi hermosa novia que la canción que dibuja poco a poco el bellísimo rostro del cual estoy enamorado. Gracias Dënver, en serio, gracias.

No hay comentarios:

Publicar un comentario