viernes, 31 de diciembre de 2010

Adiós 2010...

Lectores asiduos de este, su más precario blog de confesiones adolescentes y sentimientos reprimidos:

El glorioso y catártico 2010 ha llegado a su fin, de la manera más lenta y palpante que pudo hacerlo. Hoy, desde lo más recondito de mi habitación, a escasas 3 horas de que Dosmildiez termine su amarga agonía y nazca desde sus entrañas Dosmilonce, les deseo un muy buen inicio de año.

Ya saben, "que todo lo que pidan se cumpla, que sus metas sean alcanzadas..... bla bla bla", al final del día todo eso es basura y las palabras se las lleva el viento. Los buenos deseos no son más que simples palabras de aliento para las personas y muy a pesar de ello, nos gusta que nos las digan.

Abracen a las personas que quieren, demuéstrenles su cariño y llenénlos de alegría y sonrisas, que al final de cuentas, para eso estamos aquí, para sonreír.

Amigos: LOS QUIERO
Mi novia: TE AMO
Lectores: GRACIAS






lunes, 27 de diciembre de 2010

Reseña perdida de Pop Negro

Se había perdido el texto, nunca lo publiqué. Lo encontré ahora y parece que ya es demasiado tarde, pero me vale.


Siempre he notado la carrera de Pablo Diaz paralela a la que ha construido Noah Lennox, con sus respectivos proyectos. Folias, el primer disco de El Guincho era muy parecido a Young Prayer de Panda Bear, Pablo con una guitarra, tímidos efectos de sonido y la voz inentendible que completaba la tripleta, dando como resultado freaky-tracks de habitación.

En Alegranza vino el auge de la carrera del español, convirtió su segundo disco en su propio Person Pitch, pero, para sorpresa de muchos, ya sonaba al Guincho. Seguro recuerdan las capas y capas de sonido que envolvían cada una de las canciones de Alegranza, alucinante, extraordinario, sorprendente y sublime; para muchos de nosotros fue el mejor disco de hace dos años.

Ahora, para este 2010, regresa El Guincho con su nueva producción, que, para comenzar, cuenta con el título más cool del año. Cosa curiosa sucede en Pop Negro, se aleja de toda influencia de Panda Bear. Cabe mencionar de igual manera que deja completamente atrás esas capas de sonido que alguna vez me enamoraron a primera escucha y sintetiza sus creaciones a una cuestión más sencilla y sin complicaciones. Simply pop.

Su voz deja de ser parte de una capa sonora para pasar a ser lo que más sobresale en los temas de Pop Negro, es decir, le subió el volumen a su voz, quizá para “pegar” más, quizá también para balancear el bajeo de psicodelia que sufrió. No lo sé, lo único que me queda claro es que fue un acierto.

Además, se notan incursiones de nuevos efectos de instrumentos: nuevas percusiones, timbales (Novias), nuevas reverberaciones en la guitarra (Lycra Mistral), Güiro (Danza Invinto) trompetas, saxofón (Muerte Midi, una joya!) y la conjunción de sonidos de Soca del Eclipse no la escuchaba desde Caifanes o Santa Sabina.

En Alegranza no hizo lo de Folias y nos pusimos de pie. En Pop Negro no hizo lo de Alegranza y se le sigue aplaudiendo, en caso de que exista un sucesor será de otra manera y no tengo ninguna duda que celebraremos como en estos días lo hacemos. Aún nos queda mucho Guincho por delante, afortunadamente.